Indicaciones:
Hipertensión Arterial Esencial leve o moderada. Insuficiencia Cardíaca Congestiva clase funcional II-III-IV estables de la NYHA. Disfunción del Ventrículo izquierdo. Taquicardia ventricular y fibrilación auricular asociada a la insuficiencia cardíaca congestiva. HTA asociada a diabetes no insulino dependiente. HTA asociada a hiperlipidemia.
Cardiopatía isquémica evolucionada (angina de pecho estable e inestable). Considerar que sus efectos antihipertensivos se potencian cuando se asocia a hidroclorotiazida, atenolol, propanolol, labetalol, antagonistas del calcio, IECAs.
Reacciones Adversas:
La tolerancia del fármaco es buena a las dosis habituales; sólo un 2% de los pacientes han señalado cefaleas, mareos, astenia, hipotensión postural, dolor toráxico, infecciones de las vías respiratorias, broncoespasmo, tos, hiperglucemia, diarrea, náuseas, disnea, somnolencia, vértigo, fatiga, incremento de peso, empeoramiento de la función renal. Algunos de estos efectos adversos (mareos, hipotensión ortostática) se observan con mayor frecuencia en pacientes por encima de los 65 años y en aquellos que requieren dosis mayores a 50 mg/día. El efecto adverso más temido del betabloqueo es el empeoramiento de la insuficiencia cardíaca durante la iniciación del tratamiento que se vió con un bajo porcentaje.
Precauciones y Advertencias:
Aunque el Carvedilol no afecta la homeostásis de la glucosa, se deberá controlar periódicamente la glucemia por la posibilidad de una descompensación (hipoglucemia severa) sobre todo en diabéticos insulinodependientes o no. La asociación de Carvedilol y digitálicos puede producir trastornos de la conducción.
En pacientes con tendencia al broncoespasmo se puede producir distress
debido al posible aumento de la resistencia al paso del aire, por lo que en la enfermedad pulmonar obstructiva crónica debería utilizarse sólo cuando el beneficio supere el riesgo. El tratamiento con Carvedilol no debe interrumpirse en forma brusca, debe hacerse en forma gradual (en semanas). Puede producirse una exacerbación de la sintomatología tiróidea. La asociación con anestésicos puede producir un efecto inotrópico negativo exagerado.
Si se decide emplear en el tratamiento del feocromocitoma deberá administrarse previamente un alfa bloqueante; conociendo que éste fármaco tiene propiedades alfa y betabloqueantes, no existen experiencias de su uso en esta patología.
Los beta bloqueantes no selectivos pueden producir dolor de pecho y/o exacerbar una Angina de Prinzmetal. En menores de 18 años no se ha probado eficacia ni seguridad.
Contraindicaciones:
Bloqueo AV de 2º y 3º grado, bradicardia, shock, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, insuficiencia cardíaca descompensada, asma bronquial,
enfisema, acidosis metabólica, insuficiencia hepática, diabetes mellitus
insulino dependiente metabólicamente inestable, frecuencia cardíaca por
debajo de 55 latidos por minuto, accidente vascular cerebral en los últimos
tres meses, enfermedad del nódulo sinusal, presión arterial sistólica estable
y sostenida por debajo de 85 mmHg, valvulopatía hemodinámicamente
significativa, abuso de alcohol.
Sobredosis:
Por sobredosificación puede producirse bradicardia, hipotensión grave, shock cardiogénico, broncoespasmo, vómitos, convulsiones, alteraciones de la conciencia y eventualmente paro cardíaco.
Tratamiento:
En caso de sobredosis se recomienda hacer lavado gástrico o inducir al vómito, además de las medidas de soporte y monitoreo adecuadas.
En caso de presentarse bradicardia utilizar Atropina.Para convulsiones utilizar Diazepam o Clonazepam.Para soporte cardiovascular utilizar Glucagón con Dobutamina o Epinefrina.
Restricciones de Uso:
No se recomienda su administración durante el embarazo y la lactancia, a menos que los beneficios para la madre superen los posibles riesgos para el feto y el lactante respectivamente.
