Acción Terapéutica:
El Hierro es un componente esencial en la formación de hemoglobina, de la que son necesarias cantidades adecuadas para que pueda realizarse con eficacia la eritropoyesis y el transporte de oxígeno. Se absorbe a través de las células de la mucosa intestinal en estado ferroso y se une a la proteína transferrina para ser transportado hasta la médula ósea para la producción de glóbulos rojos.
El Ácido Fólico interviene en la maduración del glóbulo rojo permitiendo una eritropoyesis normal.
Indicaciones:
Profilaxis y tratamiento de la anemia ferropénica debida a dieta inadecuada, enfermedad parasito nutricional, mal absorción, embarazo y/o pérdida de sangre.
Contraindicaciones:
Hemocromatosis o hemosiderosis. Ulcera Péptica. Sensibilidad a alguno de sus componentes.
Precauciones:
Durante el embarazo y la lactancia, no se han descrito problemas en humanos con la ingesta oral de sulfato ferroso/ Ácido Fólico.
Reacciones Adversas:
El hierro que no es absorbido puede producir heces de color verde oscuro ó negro, lo cual es
Inofensivo. Dolor epigástrico, náuseas, diarrea.
Precauciones y Advertencias:
Durante el embarazo y la lactancia, no se han descrito problemas en humanos con la ingesta oral de sulfato ferroso/ Ácido Fólico.
