Urbana y elegante, la nueva fragancia masculina de Alejandro Sanz abre con notas especiadas y frutales de manzana, piña y un toque de cardamomo sobre un intenso cuerpo de enebro y la siempre cálida haba tonka. El elegante fondo combina notas ambaradas, acordes de madera de cedro y musgo. Una fragancia con mucha personalidad y llena de matices. Un retrato personal que refleja la esencia mas intima e inconfundible de Alejandro Sanz.